Durante el mes de octubre AEHGAR realizó el Torneo de Mucamas 2019, una competencia que reunió a 18 mucamas de 10 establecimientos hoteleros de Rosario.
El jueves 3 de octubre, la Asociación Empresaria Hotelero Gastronómica y Afines Rosario, llevó a cabo la primera edición local de la competencia que reúne a mujeres y hombres que desarrollan labores de housekeeping en los hoteles de la ciudad, en busca de coronarse como la mejor mucama o el mejor mucamo de Rosario. El evento tuvo lugar en el hotel Howard Johnson Rosario, quien puso a disposición sus instalaciones para que AEHGAR pudiera desarrollar el Torneo.
Todas las participaciones fueron supervisadas por los tres jurados especialistas: Patricia Avalle, profesional hotelera, con especialidad en servicio, técnicas de management y control de calidad; María de los Ángeles Campos, Licenciada en Turismo y Diplomada y Técnica Superior en Hotelería y Marcelo Sulichin, profesional hotelero gastronómico y consultor integral para empresas ligadas a la industria del servicio.
Valeria Andrea Acevedo, de Puerto Norte Hotel, logró completar en tiempo y forma los requisitos y el rendimiento esperado por los jueces y se llevó el primer premio de $15.000 en efectivo, y otros regalos. El segundo lugar lo obtuvo Romina Fernández, del Hotel Solans Presidente, quien se llevó $10.000 y la mención especial, de $5000, fue para Gladis Díaz, de Urquiza Apart Hotel & Suites.
El presidente de AEHGAR, Carlos Mellano, afirmó: “Esta edición del Torneo de Mucamas tiene sello propio, tomamos la apuesta, dado el creciente interés de las mucamas que ya habían participado en ediciones anteriores y querían seguir capacitándose” y agregó: “El Torneo genera valor a un oficio que es bastante difícil en el sector; brindándole a las mucamas la posibilidad de hacer conocer sus habilidades y prepararse para crecer en su área, a otros puestos como supervisora o gobernanta”. Por último finalizó: “Las tareas que realizan son un cúmulo de labores ineludibles para el hotel y para la percepción que tengan los pasajeros del servicio brindado por el establecimiento, convirtiéndose en un determinante para que ese huésped se quede y regrese, contribuyendo tanto a la imagen del hotel como a la de una ciudad turística”.