#RosarioEnCasa: Cine y series locales para descubrir.

Durante la cuarentena, uno de los contenidos de mayor circulación on line son las recomendaciones de películas y series para ocupar las horas de ocio. Pero entre tantas listas que se multiplican y apuntan a las grandes plataformas de streaming, el municipio hace una propuesta única y altamente valiosa: contenido audiovisual rosarino. Leandro Arteaga hace una selección de audiovisuales para descubrir durante el aislamiento, de fácil acceso, gran calidad y completamente gratuitos.

Por ahora, hay diez propuestas disponibles en la plataforma #RosarioEnCasa, a la cual se sumarán otras dos. Las recomendaciones son:

1. El gran río, de Rubén Plataneo.  Este largometraje documental de 2012 no puede haber escapado el radar de rosarinos y rosarinas con afición por el cine. Con paso por las salas del cine El Cairo y gran circulación por festivales internacionales, la historia de David, un joven rapero de Guinea que llegó a Rosario como polizón en un barco es entrañable.

“Plataneo tiene una mirada muy atenta y muy personal con lo que lo rodea de forma inmediata y con aquellas vicisitudes y sobre todo personas que atraviesan nuestra vida cotidiana. Es el artista el que se detiene de una forma como los demás no lo sabemos o no queremos hacer”, aseguró Arteaga.

2. La arquitectura del crimen, de Federico Actis. Este largometraje documental de 2016 se mete de lleno en la historia reciente de la ciudad y en un edificio ineludible para la construcción de la memoria y el presente: la ex Jefatura de Policía de Rosario que funcionó como centro clandestino de detención durante la última dictadura cívico militar.

A partir de imágenes, archivos inéditos y testimonios de los sobrevivientes, el documental explora las marcas de la represión política y da cuenta de la importancia de preservar los espacios de memoria para garantizar la transmisión de hechos fundamentales de nuestra historia contemporánea.

3. El cuento, de Claudio Perrin. El director de BronceUmbral y la reciente El desentierro, decidió poner este largometraje de ficción de 2019 disposición gratuita específicamente ante la coyuntura. “Esto es muy elogiable en muchos aspectos. Entre ellos, por la temática que atraviesa la película, su forma de abordarla y lo consonante que es con lo que nos toca vivir por estos días. Van a ver cómo el cuento se va estructurante historia sobre historia conforme a la relación que llevan adelante una madre y su hijo. Van a encontrar muchas ramificaciones para dar cuenta desde un lugar poético y una fibra lírica de lo que nos está pasando”, reseñó Arteaga.

4. Acha Acha Cucaracha: Cucaño ataca otra vez, de Mario Piazza. Este largometraje documental de 2017 también llega al acceso masivo a raíz del aislamiento. El filme es el único que recupera el devenir del grupo de arte experimental rosarino Cucaño, que durante finales de los 70 y en épocas de dictadura, dejó “con sus intervenciones y sus happenings una marca indeleble en la memoria de rosarinos y rosarinas”. Otra oportunidad única de asistir a la historia local reciente.

En la películas, sus ex integrantes, ya cincuentones, reivindican aquellas acciones desde el presente y se sorprenden al ver que su labor es recuperada por los investigadores e incorporada a la historia del arte político en Latinoamérica.

5. El asadito, de Gustavo Postiglione. Este largometraje de ficción de 1999 devino una suerte de clásico del cine rosarino. “Lo preeminente de El asadito es que sienta un lugar de referencia para la producción audiovisual local, para pensar de una manera distintiva lo que ocurría entonces y lo que ocurre ahora. En aquel momento fue algo muy llamativo, se estrenó a nivel nacional y a nivel comercial. Era una conquista importantísima. Pero esa visibilidad  que se dio de lo que se venía haciendo aquí, con recursos técnicos que no eran los que hay ahora, posibilitó el recorrido que hoy tenemos. Es un antes y un después”, indicó Arteaga. 

6. El censo, de Elena Guillén y Pablo Romano. En esta serie de ocho capítulos de 2016, dos jóvenes censistas atraviesan diferentes historias a partir de cada casa que visitan. “Pablo Romano es uno de los realizadores con mayor y mejor trayectoria de la ciudad. Tiene una mirada muy refinada y muy atenta, aspectos en los cuales coincide con Elena Guillén. Hay una convergencia creativa entre ambos”, valora Arteaga. 

7. Pequeño diccionario ilustrado de la electricidad, de Gustavo Galuppo y Carolina Rímini. Este largometraje de género esquivo recupera la historia de Christian Villeneuve, pionero en la investigación y el desarrollo del dominio de la energía eléctrica aplicada a los medios audiovisuales. 

“Desde el título, esta película nos genera un montón de asociaciones sonoras, visuales, semánticas. ¿Con qué tipo de imágenes habremos de encontrarnos? ¿Qué se nos va a explicar? ¿Qué se nos va a narrar? Esta película podría ser un falso documental, podría ser una ficción aunque no lo es del todo, o podría ser quizás una película ensayo”, considera Arteaga. 

8. Postres, de Nicolás Mendez. Esta serie web de dos temporadas propone historias irreverentes y de comedia a partir de encuentros a la hora del postre. “El resultado es notable, gustoso y variado. Cada capítulo responde a un mismo concepto pero con peculiaridades. Con un total desenfado, los episodios proponen un abordaje temático muy alocado que provoca risas”. 

9. Quién pudiera, de Josefina Baridón. Otra serie web de comedia hecha en Rosario, en este caso de estreno reciente. Se trata de la primera en su clase en abordar una temática LGBTIQ, a partir de la historia de tres amigas, dos lesbianas y una bisexual, que se embarcan en toda clase de aventuras después de que el único boliche gay de la ciudad cierra inesperadamente.

“Es notable por diferentes cuestiones. Es una serie feminista, hecha por mujeres feministas y lesbianas, y las protagonistas tienen estas mismas características. Aparece algo muy fuerte de hacerse y decirse con las imágenes propias. Y esa es una conquista”.

10. Los misterios de Trulalá, de Pablo Rodríguez Jáuregui y equipo. Este documental animado de 2012 fue producido por el Centro Audiovisual Rosario y la Cooperativa de Trabajo Animadores de Rosario, y es un homenaje a los animadores pioneros de Argentina.

A partir de la visita de Manuel García Ferré (creador de Hijitus y su universo) a la Escuela para Animadores de Rosario en 2008, inició este proyecto que busca documentar ese intercambio a la vez que articular un recorrido sobre la vida y obra de tan ilustre personaje nacional. 

11. El camino del elefante, de Fernando Foulques. Versión cinematográfica de una obra de teatro escrita por el reconocido autor y director Lauro Campos a mediados de los años 70.

12. Santa Fe para curiosos, de Pablo Rodríguez Jáuregui. Para la realización de este largometraje animado de 2019, quince dibujantes de distintas regiones de Santa Fe le pusieron imágenes la flora, fauna, costumbres de pueblos originarios, historia, e inmigración de la provincia. Fue producida por 5Rtv el canal de Santa Fe y la Escuela para Animadores del Centro Audiovisual Rosario.