En Italia, las marcas top de la moda se preparan para el «día después» de la pandemia

Con casi tres meses sin turistas en las principales calles de compras de Roma, y con la suspensión de actividades «no esenciales» dispuestas por el gobierno desde inicios de marzo, las marcas de lujo de la moda italiana afrontan la pandemia de coronavirus con una reconversión de sus fábricas y ya se preparan para el «día después», que también golpeará a la actividad.

En un contexto en el que el 28% de los turistas que en 2019 compraron en negocios de lujo fueron chinos, según la estadística de la líder del «Tax Free», Global Blue, la tradicional Via Condotti romana, epicentro de las grandes marcas, fue de las primeras en sentir los efectos de la pandemia.

En una calle en la que conviven Ferragamo, Armani, Prada y Dior, con alquileres que la Confederación de Comercio sitúa en torno a los 11.000 euros anuales por metro cuadrado, la falta de público transformó de manera radical el paisaje.

La tienda de la francesa Louis Vuitton, por ejemplo, retiró de la vidriera todos sus productos, al igual que la italiana Gucci, y profundizan aún más la sensación de vacío total en la calle que desemboca en una también desierta Plaza España, según observó Télam en una recorrida por la zona.

Si apenas iniciada la crisis el presidente de la asociación Via Condotti, Gianni Battistoni, había vaticinado un «año difícil» para los negocios top en un marco en el que la venta del lujo «es muy dependiente de las compras de los chinos», ya avanzada la propagación del coronavirus, el panorama es aún más incierto.

Según la Cámara de la Moda de Italia, el año podrá terminar con «al menos» un 50% de caída en la facturación del sector que el año pasado superó los 90.000 millones de euros en general.

En ese marco, la posible repaertura de las tiendas a partir del 11 de mayo puede terner impactos diferentes en los miembros del sector.

«En principio a la moda de lujo, especialmente al corredor de Via Condotti, la va a golpear más las restricciones a la entrada de turistas extranjeros que las limitaciones de espacio», asume la encargada de uno de los locales de la tradicional calle romana, 

«Las disposiciones de un cliente cada 16 metros cuadrados, y la limitación de ingreso no cambian mucho el esquema de trabajo de nuestras tiendas, en las que siempre hemos apostado a pocos clientes con altos promedios de gasto», agrega.

Desde la Asociación Via Condotti refuerzan esos números, que muestran que el ticket promedio de cada turista chino fue el año pasado de 1.496 euros, lo que da una perspectiva difícil si las fronteras italianas siguen cerradas. 

Más allá de la esperanza de una pronta reapertura, lo cierto es que la pandemia ya se empezó a sentir también en los balances. Salvatore Ferragamo, por ejemplo, facturó 220 millones de euros entre enero y marzo, frente a los 347 millones de euros del mismo periodo del año anterior, en un contexto en el que las ventas se «deterioraron» en febrero y marzo, primero en China y, luego, en el resto del mundo, «siguiendo la rápida expansión de la pandemia causada por el coronavirus Covid-19», según detalló la firma.

En ese marco, muchas de las líderes del lujo han reconvertido su producción hacia las nuevas demandas del rubro textil: barbijos y delantales. Gucci, por ejemplo, fue una de las 100.000 empresas que, durante marzo, pidió una autorización extraordinaria para abrir, y puso a su fábrica de la Toscana a producir 1.100.000 barbijos y 55.000 delantales que puso a donación de las autoridades italianas. 

También Prada envió en las primeras semanas de crisis 80.000 delantales y 110.000 barbijos al personal sanitaro toscano, que se sumaron a lo producido por otras «top» del sector como Fendi, Scervino y Valentino. 

Prada, luego de su «reconversión solidaria», consiguió el aval de la jefa de la prefectura de Arezzo, Anna Palombi, para iniciar a producir de cara a una próxima temporada que nadie en el sector puede predecir. 

Hasta el momento, la pandemia de coronavirus causó en Italia 26.834 muertes, mientras que los contagiados alcanzan un total de 105.847.

Txt: Hernán Reyes Alcaide  Fotos: Brigo Carlos