El 50% de la población mundial no realiza la actividad física recomendada para obtener beneficios en su salud. Esto impacta sobre todo en niños y adolescentes, entre los cuales el sedentarismo alcanza cerca del 60% y 70%.
El sedentarismo es una epidemia a nivel mundial, y uno de los principales factores de riesgo para el desarrollo de enfermedades cardiovasculares, diabetes y algunos tipos de cáncer.
Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) la mitad de la población mundial no realiza la actividad física recomendada para obtener beneficios en la salud. Puntualmente, en Argentina la Encuesta Nacional de Factores de Riesgo del año 2013 arrojó que casi el 55% de la población no realiza el mínimo de actividad física recomendada. Este año se estarán publicando los últimos datos actualizados sobre la situación actual de nuestro país.
Pero, lo más preocupante es que la inactividad física está afectando principalmente a los niños y adolescentes, entre los cuales el sedentarismo alcanza cerca del 60% y 70%. Esto conlleva un mayor riesgo de desarrollar enfermedades a edades tempranas e incluso aumenta de manera considerable la tasa de obesidad infantil que ya está impactando en países como el nuestro.
Se estima que para 2025 habrá 70 millones de niños con sobrepeso en el mundo, por lo que se recomienda que realicen cualquier tipo de actividad física (lúdica, deportiva o recreativa) al menos durante 60 minutos al día, una medida muy importante ya que en esta etapa se consolidan hábitos que luego serán determinantes para disminuir el riesgo a lo largo de la vida.
Prevención de enfermedades cardiovasculares
Está demostrado que llevar un vida activa reduce en un 20% el riesgo de presentar eventos cardiovasculares y por lo tanto aumenta de manera considerable la expectativa de vida. Incluso este beneficio es mayor (llega a un 30% de reducción de complicaciones cardiovasculares) mientras más actividad física realicemos.
Actualmente, las recomendaciones explican que al menos debemos realizar 30 minutos de actividad física 5-7 veces a la semana, esto no solo requiere que sea actividad deportiva, sino que también incluye la simple caminata al trabajo o al supermercado, andar en bicicleta, bailar, subir escaleras, etc.
No debemos olvidar que además del ejercicio aeróbico, entrenar la fuerza es una recomendación a veces olvidada y que debemos incluirla 1 o 2 veces a la semana, esta conducta mejora nuestro perfil metabólico (glucemia, colesterol, presión arterial, peso, etc.) y por lo tanto también disminuye el riesgo de infarto y accidente cerebrovascular.
Tengamos siempre presente que llevar una vida activa nos alarga la vida.
Por Fundación Cardiológica Argentina (FCA) con el asesoramiento del Dr. Gonzalo Díaz Babio, médico cardiólogo (MN 129.388), miembro de la FCA