Claves para mantener saludables nuestras piernas en otoño

Incluso debajo de la ropa de otoño, las piernas son nuestro sostén día a día. Aún con la llegada de los primeros fríos, podemos cuidarlas. Te proponemos tomar en cuenta estos consejos que nos permiten tener unas piernas saludables en esta y todas las estaciones del año.

Son varios los factores que le pasan factura a nuestras piernas: el sedentarismo, la alimentación, el tipo de calzado que elegimos  para esta estación, etc. Estos factores y otros factores dan lugar a la aparición de várices en mayor o menor medida. El médico flebólogo e investigador Miguel Ángel Gramajo Booth nos explica las claves para mantener una piernas cuidadas y saludables siempre.

Hidratación

Tomar agua es y será uno de los «tips» más mencionados para el cuidado de la salud en general y nuestras piernas necesitan de líquido tanto como el resto del cuerpo. Por eso, tomar varios litros al día nos ayudará a evitar las molestias causadas por la mala circulación y la retención de líquidos. También es importante usar cremas específicas para evitará que nuestras piernas se resequen cuando la temperatura empiece a bajar.

Dales una pausa después de cada jornada

Estamos en el momento del año donde empezamos a usar zapatos cerrados: botas, botines, zapatillas, etc. que «aprisionan» nuestras piernas por varias horas. Por lo que se recomienda  quitárselos al llegar a casa para poder darles un  descanso. Liberar a tus pies y tus piernas de estar «encerrados» o con tacones altos es algo que te agradecerán siempre.  Además podés darte pequeños masajes que permitan evitar la hinchazón. Recordá que si tenés várices no debés masajear directamente la vena sino por los costados.

El agua fría, tu mejor aliada

El frío es uno de los mejor aliados para la circulación sanguínea, especialmente para las piernas. El contraste de la temperatura de nuestro cuerpo con el agua hace que exista una mayor demanda de bombeo de sangre y está se dirija a nuestros órganos y tejidos. Por eso mientras te bañás, intentá que el agua fría caiga sobre tus muslos, esta acción va a mejorar  la circulación en las piernas.

Tomate unos minutos al día

Permanecer mucho tiempo parada o incluso sentada  aumenta la posibilidad de la aparición de várices. Por eso es importante que puedas darte unos minutos durante la jornada laboral para  levantarte a dar una pequeña caminata o sentarte un momento para darles un respiro a las piernas.