Desde FeArCA explican de que se tratan las Buenas Prácticas Agrícolas. El término hace referencia a una manera de producir y procesar los productos agropecuarios, de modo que los procesos de siembra, cosecha y pos-cosecha de los cultivos cumplan con los requerimientos necesarios para una producción sana, segura y amigable con el ambiente.
Podemos destacar a las Buenas Prácticas Agrícolas porque:
Promueven que los productos agropecuarios no hagan daño a la salud humana y animal ni al medio ambiente, trabajando sobre el nivel de exposición;
Protegen la salud y la seguridad de los trabajadores;
Tienen en cuenta el buen uso y manejo de los insumos agropecuarios.
La Red de Buenas Prácticas ha realizado un documento sobre el uso de las BPA en cultivos extensivos e intensivos, que se puede consultar en el sitio www.redbpa.org.ar
Tras las aplicaciones y respetando los tiempos de reingreso al cultivo de cada fitosanitario (a los efectos de cuidar la salud de los operarios), se repite el monitoreo, que en este momento permite determinar la eficacia de la técnica de control aplicada y, eventualmente, un diagnóstico temprano de resistencia al activo utilizado permitiendo tomar las medidas necesarias para evitar la diseminación de los individuos resistentes.
Los intervalos de monitoreo están en función de la dinámica de las plagas y del cultivo. Suele tomarse como valor normal 7 días, aunque el período disminuye cuando se incrementa la población de la plaga y las condiciones ambientales son favorables para su evolución.
La campaña de trigo de este año estuvo caracterizada por la aparición tardía de roya del tallo y roya estriada en materiales susceptibles, provocando graves pérdidas en lotes no monitoreados. Además, la aparición de chinches en etapas reproductivas.
En maíz se verificó una alta presión de roya en siembras tempranas y materiales susceptibles. Alta presión de cogollero y oruga de la espiga en siembras de diciembre con daños variables según evento.
En soja, se observó alta presión de bacteriosis, septoria y aparición tardía de cercospora kikuchii y MOR. Apareció el barrenador del brote, plaga que prácticamente había desaparecido con la introducción de la SD. Además, alta presión de chinches en los cultivos de segunda. Estos son los datos que manejamos en la Asociación Argentina de Protección Profesional de Cultivos Extensivos (AAPPCE), que está conformada por profesionales involucrados con el manejo de cultivos extensivos a lo largo de todo el país.
Con nuestros colegas coincidimos en la forma de evaluar las problemáticas a las cuales hacemos frente: Promovemos la protección profesional de cultivos dentro de una agricultura sustentable que permita la seguridad alimentaria, protegiendo el medio ambiente y el capital humano; y compartimos un modo de trabajo participativo, que favorezca la creación de soluciones innovadoras y sustentables haciendo un uso racional de los recursos.